Cortesía de Air Care de México

Los Filtros Electrostáticos son dispositivos cuya operación no se basa en barreras físicas, sino que detiene a las partículas como el polvo o el humo, mediante el uso de cargas eléctricas inducidas únicamente en ellas, para impedir su paso de un lugar a otro. El fenómeno por el cual a las partículas cargadas eléctricamente en la dirección de un campo eléctrico se le conoce como Electroforesis. Al elevar la cantidad de energía que el sistema utilice, mayor eficiencia recolectora se tendrá.

Los Filtros Electrostáticos hacen pasar el flujo de aire por donde se encuentran electrodos emisores de miles de voltios de energía negativa eléctrica que ionizan las partículas que están siendo aerotransportadas por él en una corona eléctrica, para que, placas cargadas positivamente localizadas inmediatamente después, las atraerán hacia ellas para su remoción de manera eficiente. La eficiencia en particular se ve determinada por la Resistividad Eléctrica, que se refiere a la capacidad de las partículas para aceptar o dificultar la carga eléctrica y, la Distribución del tamaño de las partículas, que determina el tiempo para cargarla. Las partículas que fueron atraídas hacia las placas cargadas liberan su carga naturalmente, pero quedan finalmente atrapadas debido a la fuerza de cohesión intermolecular.

La corona eléctrica se forma a partir de voltajes típicos en la industria de corriente alterna para descomponerse en pulsos de hasta 100,000 voltios y corriente muy baja. Una vez capturados las partículas, se utilizan diferentes métodos mecánicos para desprender la placa de partículas hacia una tolva, usualmente golpeándola o martillándola.

Los Filtros Electrostáticos son utilizados en la industria de manera amplia para el humo derivado de los procesos de producción, así como, en purificadores de aire residenciales.